Nunca más Autor: Mtro. Fernando Martínez Moreno

Damas y caballeros, la razón y motivo por el cual me encuentro presente ante ustedes radica en la fase final de todo lo que alguna vez definió mi realidad, mi verdad y mi existencia, partiendo por el mismo factor, elemento y principio por el cual todo comenzó, el aspecto epistemológico de mi origen como entidad guerrera, siendo en aquel lejano plano cronológico donde solía ser un joven guerrero, renegado, errante y con una rebeldía sin igual, vagando en diversos senderos de gran incertidumbre, justo hasta aquel momento e instante por la cual gracias al amor, el cariño, la fuerza y el poder de una musa que mi vida adquirió un giro inesperado ya que fue por ese aliento de vida que de ella emanaba que fui salvado, transmutado y reformado de todo pensamiento y acto de infamia que hubiera yo obrado de forma mercenaria. En cierto punto, parte de aquel vínculo entre aquella gran musa y yo, tuvo en poder y la fuerza de generar cosas increíbles como grandiosas, logrando diversas hazañas durante los años posteriores, buscando siempre ser, su guardián, su caballero, ser el mejor en cada aspecto de mi pensar, mi sentir y actuar, tanto en lo individual como en lo colectivo, buscando siempre ser digno y merecedor de ella a cada instante, siempre luchando en toda batalla y guerra por ella y para ella, sin embargo el destino y la coyuntura elemental y factorial nos traiciono rotundamente. Lamentablemente mi musa ya no se encuentra conmigo, dejándome en total desolación en esta realidad distorsionante y decadente, fue por ella que pase de ser una entidad divagante a ser una entidad de ciencia, arte y fe, ascendiendo cada vez más alto, en la búsqueda del poder máximo con la única finalidad de transcender más allá de todo paradigma y contribuir a una mejor realidad y existencia para mi musa, sin embargo, todo aquello por lo que he luchado de manera incesante ha perdido todo significado, así como su significante, siendo ahora uno de los seres y entidades más poderosos de la existencia, he perdido toda calidez sobre la razón del ser sobre, el pensar, el sentir y el actuar particular y general, por lo que he de decir y anunciar que nuca más he de continuar con aquel legado sin sentido ya que la causa principal de aquella gran campaña guerrera ha dejado de existir como tal, dejándome en una completa soledad, dolor y amargura petrificantes. El tiempo ha transcurrido de forma inevitable, a lo cual me comenzado a deteriorarme de forma gradual y ascendente, dejándome como un muerto en vida a cada momento e instante de esta tortuosa realidad en la cual me he visto forzado a transitar, siendo de nueva cuenta un errante sin oficio ni beneficio, nunca más seré aquel ser que ella alguna vez amo con pasión y locura desbordante, nunca más he de poder sentir alguna causa por la cual deba contribuir a la trascendencia y supervivencia de esta realidad gris y oscura en cada fibra de su ser, nunca más seré en lo individual y en lo colectivo, solo puedo contemplar en mi memoria fragmentada aquellos momentos e instantes, en los cuales a pesar de todo, halle paz y felicidad plena por alguien por quien valía la pena el luchar y ser uno solo con ella. Hoy en día me encuentro fragmentado y roto, en todas y en cada una de las fibras de mi distorsionado y paradójico ser, perdido sincronía con todo aspecto de la realidad, soy ahora una entidad gris, carente de todo sentido animado quizás, o quizás soy el fantasma de todo aquello que fui y en lo que me he convertido, ¿cuál será la verdad relativa y absoluta de todo ello y aquello?